Se avecina una fuerte pérdida del poder adquisitivo de los salarios

Por Marcelo García.

La depreciación salarial en Chubut fue muy fuerte a lo largo de los tres primeros años del macrismo. En 36 meses de la gestión de Cambiemos, los sueldos privados perdieron un 17,4% del poder adquisitivo; y en el primer trimestre de este año habían conseguido ganarle a la inflación con un 11,7% de aumento. La nueva devaluación y la previsible inflación futura volverán a golpear el poder de compra de los sueldos.

Los impactos de la crisis se traducen en un muy fuerte retroceso del valor de los sueldos privados en la provincia de Chubut. Desde enero de 2016 cuando asumió la gestión de Mauricio Macri y hasta diciembre pasado, los salarios se depreciaron 17,4%.

Los datos aportados por el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) -que depende de la degradada Secretaría de Trabajo de Nación- revelaron que el poder adquisitivo de los trabajadores privados provinciales tuvo una recuperación en el primer trimestre de 2019, ganándole a la inflación por 11,7 puntos porcentuales.

Desde la llegada del macrismo la pérdida total había sido de apenas 5,7%; pero la continuidad de la inflación y la disparada que se avecina impactará de lleno en el poder de compra, sin que aún se pueda dimensionar la profundidad de los efectos que sufrirán los asalariados privados.

En función de las publicaciones del Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial, las pérdidas de poder adquisitivo fueron del 9,5% a lo largo del año 2016 y al año siguiente tuvieron una leve recuperación que apenas llegó al 2,5%.

Durante 2018 la caída fue del 10,3% y en los primeros tres meses del 2019 habían conseguido ganarle a la inflación en 11,7%. Ahora la inflación se está incrementando nuevamente y muchas ramas de la actividad privada quedarán relegadas en materia salarial.

Los más afectados

Las ramas del empleo privado más afectadas por la pérdida salarial en Chubut durante los 39 meses de macrismo fueron los trabajadores del comercio minorista con un -13,9%; los de hotelería y restaurantes con -9%; los obreros textiles con -8,4%; y los trabajadores de la industria manufacturera provincial con -7,3%.

La constante suba de los precios y servicios que se produjo en los meses posteriores, que en la Patagonia se reflejaron en una inflación superior al 57%, indudablemente siguieron erosionando el poder de compra de los trabajadores en blanco que en general están mejores pagos que quienes se encuentran en la informalidad.

Esta nueva corrida del dólar frente al peso -con una devaluación cercana al 25% en apenas dos días- seguramente seguirá trasladándose a los precios y disparando un espiral inflacionario, en el que los salarios no pueden acercarse el ritmo de las remarcaciones y cuando lo logran mediante paritarias -si consiguen alcanzarlos- ya sufrieron una pérdida muy difícil de recuperar.

Fuente: El Extremo Sur


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