Pablo Garay (Dr. En Derecho Internacional) nos habló sobre la Política pendular de Brasil

 

 

Jair Bolsonaro, el actual Presidente electo de Brasil, posee una Cámara de Diputados propios compuesta por 52 personas de un total de 513, que lo siguen en sus ideales, ya que lleva recorrido 8 partidos políticos antes del actual, y no poseía un plan determinado. Como así también, fue en el pasado Profesor de Educación Física, y le gustaban mucho en los 90′ salir a pescar ya que llevaba otro estilo de vida, pero a su vez no lo fueron convenciendo del todo los partidos por los cuál pasó y llego al actual que le abrió una brecha y a su vez lo hizo escalar a Presidente.

En el Senado posee 5 seguidores acérrimos que son incondicionales de los 81, donde se le va tornar difícil sacar adelante distintas leyes. Por otro lado, Bolsonaro cuando asumió en su actual Partido Político, el cual se denomina Partido Social Liberal, lo hizo con 5 millones de planes sociales, ya que intentaron poseer más poder pero no lo lograron en su totalidad. Luego, cuando Dilma Rousseff termina, hasta el día de hoy Brasil posee 51 millones de planes sociales (25% de la fuerza productiva del país), que es un peso muy grande, y también existe gente que como en Argentina ha quedado afuera del Sistema Tradicional Productivo, y no se cree que como se encuentra la efervescencia y la polarización, la gente aguarde en sus casa esperando a qué va a hacer el actual presidente.

Uno de los sucesos que existieron en el 94′, cuando se estudia la Constitución en Argentina, explica Pablo Garay que le enseñaron en Brasil ésto no sería posible, porque una de las cuestiones de las instituciones que se crean en Argentina son el Consejo de la Magistratura, que precisamente es “interpoderes” de varios poderes se conforma un nuevo poder que elige jueces, después se puede hablar si no es muy transparentes o si posee errores, y ésto en Brasil está prohibido, de tal forma que nadie los puede ni si quiera tocar o acercarse ni 100 metros de dónde vive un Magistrado, ya que los poderes no se pueden mezclar ni molestar en su labor. Es por ésto, que existe tanta tensión y a la vez es difícil, cuando deben resolver un conflicto en materia judicial, ó cuando el judicial debe resolver algo con el Ejecutivo, no emiten opinión ya que no se pueden intervenir. Por ende, dicha institucionalidad hace que Brasil sea tan distinto en comparación a la Argentina. 

El poderío que Brasil quiere recuperar es el Industrial, ya que los industriales siguen teniendo poder, y en los 90′ se puede decir que la oligarquía junto con los industriales llevaron a un Presidente que se llama Fernando Collor de Mello, que luego lo sacan por juicio político, y una de las personas que votó fue Dilma Rousseff. Mas tarde, en el año 2016 fue Fernando Collor de Mello quién votó a Dilma Rousseff para sacarla de la presidencia. 

Fuente: Programa Num3ros/Editor: Patricia Solís